08 marzo, 2015

ES COMPLICADO, y se los dice alguien sin experiencia en la complicación prácticamente. Digamos que no experimenté totalmente esa palabra y aun así creo que es complicado.
Lo quiero, amo soñar con él y lo que sueño, tiene esos gestos para conmigo que no puedo dejar pasar y valoro completamente la valentía que tiene para hacerlos, porque yo no lo haría ni en chiste. Hasta ahí no hay ni una pizca de complejidad, él y sus cosas que me encantan y yo y... Mi indecisión. No es una indecisión convencional, no es un invento como obstáculo, es la realidad. Cuando hace esas cosas, hasta cuando no, es todo color de rosa, hasta sueño las mejores escenas entre nosotros; pero cuando estamos accidental y repentinamente de frente no puedo evitar mirar para otro lado y esquivarlo. Quisiera que fuera diferente, poder mirarlo fijo a los ojos y mínimamente sonreír. ¿Será miedo o mi subconsciente intentando convencerme que no es amor, que es simplemente una idea que tengo sobre él y me aferro a ella como la única salvación?


Es complicado.