Yo digo, ¿siempre fui tan aburrida? Así lo creo, pero tal vez lo siga siendo, pero de otra manera. Nunca me entienden, antes, capaz por otros motivos, de los cuales ahora no son los mismos. ELLOS, la palabra que siempre está en mi mente, en mi boca, en mí ser, en mis escritos, en todo momento. Nunca dejo de pensar en ellos, de distintas maneras: '¿qué harían si estuvieran en esta situación?' '¿qué pensarían de mi?' '¿sería humillante hacer tal cosa?' '¿que deben estar haciendo?'
Siempre es lo mismo, y, ¿por qué debería importarme? ¡yo soy como soy! Pero no es exactamente como pienso.
En la escuela no es un paraíso justamente, pero es similar a un cuento de fantasías, donde podes soñar, reír, hablar y encontrarte con gente y amigas con las cuales sientes como hermanas, que te hacen volar, hasta la nube más alta la cual te deja entrar pero nunca salir hasta su partida. Cuando ella parte, todas y todos partimos, nadie puede quedarse. Uno imagina allí, todo, lo bueno, lo malo, crea un mundo, una familia, si, una familia, 'adoptas' hijas, nietas, esposo ¡y hasta mascota! y todo lo que podríamos llamar perfecto; ok, charlemos sobre esa amplia palabra, la cual abarca muchas cosas. Perfecto se le llama a lo que lleva un punto justo, que no es ni mucho, ni poco, simplemente el punto exacto, ejemplo, punto justo de felicidad, tristezas, responsabilidades, ignorancia, etc. Así es mi mundo en la escuela y también eso son ellos.
Cuando salgo de ese mundo en el que convivo la mayor parte del día me siento indefensa; mis padres, me toman del brazo y me bajan fuertemente de esa fantasía que siempre desee que nunca terminara. Pero no con intención de que mis padres jamás existan, tan solo que me entiendan, como lo hacen mis amigas, si es que lo hacen. Ahí caigo a la triste y desgraciada realidad, se tal vez que si yo lo pienso de otra manera, las cosas son menos trágicas, y más resplandecientes, pero cuando llego a mi casa siento que no encuentro a nadie que me entienda de la manera que quiero; y los únicos que me entienden completamente están a millas de distancia. Pero que nada va a cambiar.
Ellos son:
- Mi razón de existir
- Mi razón de creer en los sueños
- Mi razón de estar feliz
- Mi razón de estar triste
- Mi razón de llorar
- Mi razón de reír
Ustedes son mis razones de todo lo que hago, siento y pienso. Por eso los amo tanto y espero jamás olvidar lo que siento por ustedes, ni dejar de ser lo que soy, porque aunque tenga altos y bajos, ustedes lo provocan, y eso forma parte de la experiencia de ser Jonática.
14/8/09.
