Tal
vez mi decisión no sea bien recibida, al menos esta vez no será algo que reciba
mal yo.
Prefiero
mantenerme al margen por el momento, reservarme y preservarme únicamente por mi
bien. No me siento en condiciones de enfrentarme a cualquier situación
considerando mi situación emocional recurrente, sobre todo con respecto a esto,
por lo tanto me veo obligada a poner en la balanza cualquier posibilidad, y a
partir de ello elegir lo que considero la mejor -o menos peor- alternativa.
Prefiero primero terminar de sanar antes que exponerme a cualquier escenario
posible para el cual no estoy preparada, más bien sensibilizada.
Un
comentario disparador hizo que lo contraproducente tomara protagonismo, casi
imposibilitando contemplar una eventualidad. No quiero volver a ser testigo de
nada que no quiera escuchar, ver, percibir, o lo que fuera.
No
me gusta dar explicaciones, aunque probablemente deba darlas. Me reconforta la
idea de que, si alguna vez me arrepentí, fue por haber dicho que sí.